jueves, 18 de febrero de 2016

Objetivos Financieros:

Cuatro son los objetivos fundamentales de toda organización:
·         la máxima rentabilidad sobre la inversión;
·         el mayor valor agregado por empleado;
·         el mayor nivel de satisfacción para los clientes y consumidores; y
·         la mayor participación de mercado.



Lograr la máxima rentabilidad sobre la inversión requiere del cumplimiento de los otros tres factores en primera instancia, comenzando por un mayor valor agregado, lo cual traerá implicada una mayor satisfacción de los consumidores, y con ello una mayor participación de mercado, y como resultado final un óptimo nivel de rentabilidad.



Pero cuidado, no basta con lograr rentabilidad, además debe lograrse un nivel adecuado de solvencia y liquidez, objetivos éstos, que de no lograrse irán minando la rentabilidad de la empresa; pues bajos índices en materia de liquidez y solvencia llevarán a mayores necesidades crediticias, y condicionamientos más duros en materia de montos, tasas, plazos y garantías.


Así pues en función a las potencialidades internas (fortalezas y debilidades), y externas (oportunidades y amenazas) se han de fijar los objetivos en materia de rentabilidad para la empresa dentro del presupuesto anual (y sub-periódicos), como así también los indicadores y ratios a lograr en materia de liquidez y solvencia, y los que en materia operativa sean necesarios para lograr los beneficios y niveles de rentabilidad fijados.


La táctica consiste por un lado en llevar a cabo un análisis regresivo partiendo de los objetivos a alcanzar, para de este modo ir determinando que condiciones deben darse previamente para lograr dicho objetivo. La forma de lograr ello es por medio de un Análisis de Árbol de carácter inverso.


El Presupuesto Computarizado

Presupuestar los objetivos anuales (y de sub-períodos de tiempo) a nivel monetario y de índices (ratios) dentro de un contexto computarizado, dando lugar con ello a un Tablero de Comando, posibilitará periódica y regularmente el monitoreo tanto de la evolución del negocio como del entorno dentro del cual éste se haya inmerso.  



Así el contar diariamente con información que nos indique que tan cerca o lejos nos encontramos de los objetivos establecidos, nos servirá analizando los ratios e índices de los distintos niveles para saber la razón de los desvíos, y así adoptar las decisiones tendientes a corregir el rumbo del negocio. 




El sistema de información computarizado pasa a ser así una herramienta fundamental para el eficaz manejo de las finanzas operativas. No contar con un sistema acorde a las necesidades actuales de toda empresa, en cuanto a contar con información precisa y a tiempo a un costo adecuado a las posibilidades económicas de la empresa, es esencial.  



En la moderna concepción de los negocios empapada de la filosofía de la calidad total la actitud proactiva y preventiva tienen prioridad sobre la reactiva, y aún en éste último caso debe actuarse con la suficiente rapidez y precisión para evitar daños y posibilitar los mejores resultados posibles para la marcha de la corporación.

 La  contingencia:

Dentro del marco del punto anterior, y a los efectos de posibilitar una respuesta rápida y efectiva a las principales desviaciones y/o alteraciones dadas en la empresa y en el mercado, la dirección de la empresa debe tener estructurados planes alternativos o de contingencia a manera de un sistema de seguridad que posibilite dar una respuesta convenientemente madurada y analizada a las distintas circunstancias que se vayan dando durante la evolución de los negocios.




Muchas empresas se jactan de tener implementados grandes sistemas de seguridad contra incendios, robos, sustracción de información y estafas entre otros, pero están totalmente desguarnecidos ante las alteraciones del mercado, dependiendo de la lucidez y experiencia de sus funcionarios y asesores.


 La actualidad requiere de respuestas rápidas y meditadas, y no de simples impulsos o reacciones. Adoptar medidas sólo en base a experiencias anteriores ya no es válido pues el contexto está en continuo cambio y ebullición. Muchas empresas han perecido no por robos y estafas, sino por no saber responder a tiempo y en forma ante las nuevas realidades.

La creatividad en acción:


La administración operativa requiere hoy más que nunca creatividad e innovación. Tratar de dar solución a los nuevos problemas con viejos remedios ya no es válido.



 El atenerse a viejas y gastadas fórmulas ante un mundo que responde a nuevas realidades políticas, financieras, tecnológicas y sociales no darán una solución apropiada y efectiva. 



El administrador financiero hoy más que nunca necesita de creatividad para dar una respuesta válida a las nuevas circunstancias.




La creatividad no es sólo una metodología a emplear en materia de diseño de productos y servicios, o en el de marketing y publicidad, sino una forma de pensar y actuar necesaria para todos los sectores y áreas de la empresa. 






Dar lugar a nuevas y creativas soluciones a problemas de financiación o a la resolución de problemas crediticios o de liquidez requiere de un plus, de un toque de imaginación que nos permita dar con soluciones y respuesta donde parece no verlas.
 Funcionamiento del Sistema:







Los entornos Externo e Interno inciden en los resultados e indicadores del Tablero de Comando, motivando la aparición de un alerta (producto del Sistema de Alerta Temprano) el cual debe originar inmediatamente acciones tendientes a generar efectos en el entorno interno de manera tal de compensar y corregir los desvíos producidos o con factibilidad de producirse, y que han sido detectado por el Sistema.


 Muchas de esas acciones son producto de Planes Contingentes previamente estipulados para el caso en que se dieran determinadas circunstancias.






El resultado de las acciones emprendidas debe monitorearse a través de los nuevos resultados que arroje el Tablero de Comando, de manera tal de realizar nuevos ajustes en un proceso de mejora continua tanto de las tomas de decisiones como de los procesos internos de la empresa.

Las Finanzas Públicas:

CLASIFICACION DE LAS FINANZAS




-Finanzas Privadas.




Las Finanzas Públicas:
Las Finanzas Públicas constituyen la actividad económica del sector público, con su particular y característica estructura que convive con la economía de mercado, de la cual obtiene los recursos y a la cual le presta un marco de acción. Comprende los bienes, rentas y deudas que forman el activo y el pasivo de la Nación y todos los demás bienes y rentas cuya administración corresponde al Poder Nacional a través de las distintas instituciones creadas por el estado para tal fin. El Estado para poder realizar sus funciones y afrontar sus necesidades públicas, debe contar con recursos, y los mismos se obtienen a través de los diferentes procedimientos legalmente estatuidos y preceptuados en principios legales constitucionales.




Las finanzas públicas establece; estudia las necesidades; crea los recursos; Ingresos; Gastos, El estado hace uso de los recursos necesarios provenientes de su gestión política para desarrollar actividades financieras a través de la explotación y distribución de las riquezas para satisfacer las necesidades públicas (individuales y colectivas).

IMPORTANCIA DE LAS FINANZAS EN LA ECONOMIA 
NACIONAL:



Las finanzas cumplen un papel fundamental en el éxito y en la supervivencia del Estado y de la empresa privada, pues se considera como un instrumento de planificación, ejecución y control que repercute decididamente en la economía empresarial y pública, extendiendo sus efectos a todas las esferas de la producción y consumos. 




La economía nacional es movida por la actividad financiera por cuanto esta última da lugar al proceso que acelera el incremento de las inversiones privadas como consecuencia el aumento de la demanda global, imputable exclusivamente a la actividad financiera. 





La actividad financiera influye sobre el costo de producción de las empresas modificando la eficiencia marginal del capital; elemento determinante del volumen de inversiones privadas, así como también compromete la capacidad productiva; o lo que es lo mismo, sitúa a los individuos y a las empresas en la imposibilidad de producción, o liberarlos, por el contrario de unas incapacidad preexistente.




 Igualmente la actividad financiera influye sobre el incentivo para invertir o para producir